EEUU PERSIGUE A LOS OPERADORES DE DRONES QUE REVELARON LOS CRÍMENES DEL GOBIERNO
Cuatro ex operadores de drones de la Fuerza Aérea de EEUU, que decidieron denunciar públicamente los crímenes cometidos, están recibiendo graves presiones y maniobras de intimidación por parte del gobierno.
Concretamente, los operadores han recibido amenazas de persecución penal, intentos de intimidar a sus familias y han visto bloqueadas sus tarjetas de crédito y sus cuentas bancarias han sido congeladas, según denuncia la abogada de derechos humanos Jesselyn Radack.
“Ellos realizaron su denuncia pública y en pocos días sus tarjetas de crédito y cuentas bancarias están congeladas”, Radack lamentó en su cuenta de Twitter.
Michael Haas, Brandon Bryant, Cian Westmoreland y Stephen Lewis, que ejercieron de operadores de dron para la Fuerza Aérea de Estados Unidos, han hecho públicas las cuentas detalladas de la corrupción generalizada y de la indiferencia institucionalizada hacia las víctimas civiles que caracterizan al programa, tal y como indicábamos en el artículo 4 OPERADORES DE DRONES DE EEUU ACUSAN A SU GOBIERNO DE CRÍMENES CONTRA INOCENTES
Según estimaciones fiables, el 90% de los muertos en los ataques con aviones no tripulados son personas totalmente inofensivas e inocentes, por lo que el programa anti-terrorista no tiene ningún tipo de efectividad en la lucha contra el terrorismo, sino más bien lo contrario, pues se convierte en una fábrica de personas que odian justificadamente a occidente y a EEUU.
Según uno de los operadores denunciantes, Michal Haas, fue incapaz de reprimir sus remordimientos de conciencia y se refugió en el abuso de alcohol y drogas, algo que según él, sucede a otros operadores, que también sirven bajo los efectos de las drogas.
Hay indicios de que el gobierno ha tratado de intimidar a los denunciantes mediante la intimidación a sus familias.
En octubre, mientras Brandon Bryant se preparaba para testificar sobre el programa de aviones no tripulados ante un comité parlamentario alemán, su madre LanAnn recibió la visita en su casa Missoula, Montana de dos representantes de la Oficina de Investigaciones Especiales de la Fuerza Aérea. Los hombres le dijeron a la mujer que su información personal se encontraba en manos de Estado Islámico, que había puesto su nombre en una lista de objetivos. También le dijeron que no debía compartir esa información con nadie, aunque ella rápidamente desobedeció, informando a la abogada de su hijo y de los otros operadores denunciantes.
Según Radack, un episodio muy similar ocurrió en marzo pasado cuando el padrastro de otro denunciante recibió una visita casi idéntica.
No deja de ser significativo y muy sospechoso, que agentes de EEUU amenacen a los padres de los denunciantes diciéndoles que Estado Islámico los tiene en el punto de mira…
Es decir, cuando alguien es incómodo para el gobierno de los EEUU, se convierte automáticamente en objetivo de Estado Islámico…¡Más claro el agua!
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